Interrogatorio erótico a bruja para obtener confesión

El uso de la tortura placentera para obtener una confesión.

Vestuario: El inquisidor deberá llevar atuendo de dominico, la bruja cualquier vestido de entre el siglo XVI i XVII. Te puedes inventar una religión y convertir el inquisidor en inquisidora, si así lo deseas. O tu personaje de inquisidor puede ser un disfraz para una mujer aventurera, por ejemplo.
Lugar: Lo más parecido a una mazmorra.
Objetos necesarios: Material para atar.
Advertencias genitales: Ninguna.

Antes del encuentro envía instrucciones a la persona. Ordénale resistir al máximo antes de confesar. Nota: Este es un juego ideal para personas sumisas orgullosas y un poco rebeldes.
“Captura” a la bruja y llévala a tu sala de torturas.
Una vez allí explícale que conoces su secreto: Resiste el dolor de forma sobrehumana gracias al demonio. Pero sabes muy bien lo cachonda que es y el orgullo que tiene. “Hoy te vas a humillar para conseguir un orgasmo“. Pero sólo lo conseguirás confesando que eres una bruja.
Procede a atarla en una posición cómoda, si lo deseas. Va a estar bastante tiempo así.
La persona esperará ser torturada con dolor, pero vas a comportarte de forma muy diferente. Podrás usar un poco de dolor si esto la excita, pero tu objetivo será conseiguir calentarla al máximo con todo tipo de técnicas.
Cuando esté muy, muy, muy caliente empieza a estimular sus genitales.
Llévala hasta muy cerca del orgasmo para pararte de forma brusca. Aquí una palmadita puede ser útil para interrumpir.
En ese momento le preguntas si es una bruja, como te contestará no, vuelve a estimularla hasta cerca del orgasmo y repite la pregunta.
Cuando lleves unos cuantos ciclos le puedes proponer algo humillante como lamerte los pies, frotarse contra tu brazo, o hacerte un servicio oral. Con la promesa de que vas a liberarla.
No lo hagas, continua jugando con su ansiedad. Hasta que confiese.

Nota:

Todos los juegos requieren de un consenso entre todos los participantes.
Todos los participantes han de poder parar el juego en cualquier momento.
Es muy recomendable acordar palabras de control para parar el juego o comunicar que algo no estás dispuesto a soportar. Por ejemplo: Rojo para parar y amarillo (mejor groc que es más corto) para pedir que pare de hacer algo pero no el juego. Algunas personas añaden verde para pedir que algo que te guste continúe.