15 de Enero Picarón
La mayoría de manuales de sexología nos ofrecen una visión delicada del Erotismo. Las otras formas parecen “políticamente incorrectas”.
Pero mucho me temo que mucha gente disfruta mucho más de formas menos educadas de hacerlo. Vamos, lo que podríamos denominar “sexo guarro”.
El estilo picarón es una suspensión temporal de la cortesía social. Es un pacto cómplicidad entre las personas participantes. Desde fuera puede parecer un espectáculo degradante y obsceno, pero desde dentro es muy divertido.
Mucha gente lo hace pero muy poca lo reconoce.
En un encuentro erótico picarón las personas dicen tacos, van al grano y tienen una actitud gamberra. Se dicen cosas como “puta” o “cabrón” pero no con intención de insultar sino de crear un ambiente favorable a soltarse del protocolo social.
Cena calentorra con insinuaciones marranas con final oral en el lavabo.
Quedad en un restaurante para cenar.
Solo llegar sueltale al oído algo así: “Hoy vengo toda mojada” o “ya en el taxi he empezado a trempar”
Durante toda la cena puedes ir exponiendo las ganas que tienes de “chuparle”.
Hacia el final sugiérele que vaya al lavabo y te espere allí.
Pasados unos segundos, como máximo un minuto. Ves hacia allí y entra (si se puede)
Una vez dentro bésala, magreala y termina regalándole una buena pero breve sesión de sexo oral.
Al terminar volved a la mesa, pagad e iros a casa para continuar la fiesta.
No existe diferencia en función de si la persona tiene genitales masculinos o femeninos.
Delicado: Es difícil darle un toque delicado pero nada es imposible. Puedes ser soez de forma educada ¿Cómo se hace? Pues usando palabras bonitas para describir acciones obscenas. Por ejemplo: “Sin duda venir aquí contigo me ha resultado tremendamente cálido. Tanto que necesitaría una ducha fría para solucionarlo. Si no tinenes una idea mejor, claro”.
Pícaro: El juego es ya pícaro de por si, pero puede ser más y más obsceno.
Cruel: No la dejes llegar al orgasmo en los lavabos, déjala con ganas. Eso sí, di algo parecido a “Ahora guarra / gañán te vas a tener que aguantar hasta que a mi me de la gana de dejar que te corras”.
Dominante: A las marranadas añádele una actitud autoritaria y humillante. Ordénale a ella ofrecerte el sexo oral y suelta frases vejatorias mientras lo hace.
Para tres: En el lavabo una de las tres ofrecerá, por turnos sexo oral a las otras dos. También podéis jugar a la “pringada”. Dos de vosotras váis al lavabo mientras la tercera se queda en la mesa. Después le explicais qué ha sucedido.
También podéis alquilar un reservado y así no tenéis que ir al lavabo, lo podéis hacer allí mismo.
Para más de tres: Como tanta gente yendo y viniendo de unos lavabos en un restaurante puede ser un poco evidente, lo mejor es que ocupéis un reservado y montéis el juego allí.
erótico.
