Apostar es una de las actividades preferidas por los humanos. La mayoría lo hace por dinero pero vosotros podéis hacerlo por otras razones. Por ejemplo, eróticas.
Propuesta vainilla.
Durante toda la semana propondrás diferentes apuestas sobre sus reacciones eróticas. Y te jugarás puntos de voluntad. Por cada apuesta ganada un punto de voluntad. Quien gane más puntos de voluntad podrá exigir a la otra u otras personas cualquier práctica erótica el domingo. (Por supuesto consensuadas).
Ejemplo: Me juego tres puntos de voluntad a que soy capaz de llevarte al orgasmo en cinco minutos.
Toque amargo.
Se irónico permitiéndole apostar. Por supuesto siempre va a perder porque aquí mandas tú, no el azar. Ríete de su ingenuidad y obliga a la persona a hacer lo que te dé la gana durante toda las semana. Y el domingo la castigas por haberse dejado.