Para dos
Material necesario:
Prepara pequeños saquitos de papel rellenos del chocolate en polvo.
Desnudaos mútuamente.
Coje uno de los saquitos y rompelo encima de su cuerpo. En una zona bastante inocua.
La persona hará lo mismo.
A continuación lameos mútuamente para limpiaros.
Coged otro saquito y rompedlo encima de una zona más erógena. Haced lo mismo.
El último dejadlo para los genitales. Y seguid chupando y lamiendo hasta el orgasmo.
Cuestión de sexos
Delicado: Esparcid con cuidado el polvo de chocolate sobre el cuerpo y lamed sin grandes aspavientos.
Picarón: Al lamer su cuerpo para limpiarla del polvo deja en evidencia con gestos y palabras hasta qué punto te calienta hacer tal cosa.
Cruel: Haz asquito o di que se te queda la boca seca para dejar de chupar justo ante de su orgasmo.
Dominante: Tírate el polvo encima y obligala a limpiarte. Ensuciala también a ella y después castigala por no ir limpia. Si es con azotes, con azotes.
Cuestión de estilo
Delicado: Intenta que el momento de agarrar sus manos sea lo menos brusco posible. Pídeselo antes o adviértela que lo vas a hacer. Halaga su cuerpo y los gestos de su cara a la vez que la masturbas.
Picarón: Destaca lo caliente que está en el momento de agarrar sus manos. Dile algo así como: “Te las agarro para que no te lo hagas tu sol@ guarr@”.
Cruel: Masturbala primero para agarrar sus manos en el momento más cercano al orgasmo. En ese momento te detienes. Otra variante es pedirle que se masturbe y cuando esté apunto la agarras para frustrarla.
Dominante: Agarrar las manos es ya una acción dominante. La masturbación debe parecer lo más impuesta posible. Algo que haces porque te da la gana y que su permiso no importa lo más mínimo.
Toque liberal
Para tres: Hacedlo todo de forma simultánea entre los tres. Tanto reventar bolsitas como lamer para limpiar.
Para más de tres: Convoca un holy de chocolate en polvo con una segunda fase de limpieza a base de lengua.