Material:

Lubricante de sabor fresa.

Lubricante de sabor limón.

Una venda

1. Desnuda totalmente a la persona.

2. Pídele que coloque lubricante en distintas zonas del cuerpo. Con la siguiente regla: Limón para lamer, freas para chupar.

3. Véndate los ojos.

4. Empieza a lamer su cuerpo prueba primero con la punta de la lengua para comprobar el sabor. Y actúa en consecuencia.

Delicado: Esparcid con cuidado el polvo de chocolate sobre el cuerpo y lamed sin grandes aspavientos.

Picarón: Al lamer su cuerpo para limpiarla del polvo deja en evidencia con gestos y palabras hasta qué punto te calienta hacer tal cosa.

Cruel: Haz asquito o di que se te queda la boca seca para dejar de chupar justo ante de su orgasmo.

Dominante: Tírate el polvo encima y obligala a limpiarte. Ensuciala también a ella y después castigala por no ir limpia. Si es con azotes, con azotes.

Delicado: Actúa con mucho cuidado, sobre todo a la hora de chupar.

Picarón: Como estás con los ojos vendados deberás soltar alguna palabrota de cuando en cuando.

Cruel: En cuanto notes que estás chupando o lamiendo una zona interesante, deja de hacerlo. Pon como excusa que se te duerme la lengua.

Dominante: Invierte el juego. Que sea ella quien tenga que lamer. Y castígala de forma adecuada si se equivoca.

Para tres: Una lamerá la fresa y la otra lamerá el limón. O viceversa.

Para más de tres: Convoca una cata de lubricantes de sabores a ciegas. Todos deberán pobralos encima de una persona y adivinar su sabor.